NO + VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES
El próximo 25
de noviembre se celebra el día internacional para la eliminación de la
violencia contra las mujeres.
Ese
día se recuerda la cara más dramática de la discriminación de la mujer
como son los asesinatos o los malos tratos que sufren las mujeres a cargo de
sus parejas o exparejas, que en lo que va de año se ha cobrado la vida de 43
mujeres.
El Consejo de Europa reclama la
igualdad de derecho y de hecho, la desaparición de la violencia estructural que
sufren las mujeres como el único medio capaz de prevenir la violencia de género
que cada año mutila, daña la salud de las mujeres y en el peor de los casos
cuesta la vida de miles de mujeres en el mundo.
Por tanto hay que reclamar de los
poderes públicos para que garanticen unos servicios de atención y cuidado de
las criaturas y personas dependientes con la finalidad de que sea el Estado
quien atienda las tareas de atención y cuidado, permitiendo a las mujeres una
salida del hogar y no el camino inverso como está pasando en la actualidad. Igualmente
eliminar la política de recortes en recursos sociales que junto con la ausencia
de políticas eficaces de igualdad inciden en el agravamiento de los factores de
la violencia estructural. A tiempo de
denunciar el fracaso de las políticas en la lucha contra la prevención de la
violencia de género y los recortes destinados a políticas dirigidas a
promocionar la Igualdad de Oportunidades entre mujeres y hombres. Al tiempo de
reclamar la aplicación, desarrollo y evaluación periódica de las medidas y
bonificaciones relativas al fomento del empleo y del programa socio-laboral de
las mujeres víctimas de violencia de género, junto con información y evaluación
periódica de la Estrategia Nacional para la erradicación de la violencia de
género (2013-2016), haciendo efectiva la colaboración con los agentes sociales
contemplada en distintas medidas del Plan Estratégico para su desarrollo.
Promoviendo cualquier iniciativa que tenga por objeto la Igualdad de
Oportunidades de mujeres y hombres y combatir la discriminación, sobre todo
cuando hablamos de la vida de las mujeres y una vez que se han suscrito esos
compromisos hacer todo aquello que sea preciso para cumplirlos, dotarlos
económicamente y evaluar las actuaciones acometidas, porque cuando hablamos de
la vida de las mujeres no todo vale,