ALBERT RIVERA

UNA BOCANADA DE AIRE FRESCO EN POLÍTICA

Ayer jueves, bueno en las primeras horas de hoy día 10, espere para ver un programa de la 1, en el que varios periodistas entrevistaban a Albert Rivera impulsor del nuevo movimiento ciudadano. Me alegré haber trasnochado, me gusto, el tono, contenido y forma de su intervención, muestra una frescura que me hacía recordar al Felipe González Márquez de los setenta.

La voz le hace parecer aún más joven de lo que es, y su timbre le muestra casi tímido, pero es un orador seguro que refleja con su voz las emociones que provocan sus palabras. Es un líder poliédrico, posiblemente él que demanda la sociedad actual. Aparece reflexivo y enérgico, expresa algo que todos sabemos y considera a los oyentes inteligentes, mostrando sus ideas con la claridad, sus frases tienen finales claros y enérgicos que se entienden bien y reflejan su intención reflexiva y comunicativa.

En estos tiempos en el que los políticos tradicionales, han caído en desgracia, tienen demasiadas consignas partidistas, la gente muestra hartazgo por sus continuas frases hechas. Rivera muestra a  Ciutadans como el Partido de la ciudadanía que devuelve el protagonismo al pueblo. Manifestando que "Hay una nueva etapa política que conlleva cambios en la forma de comunicar, en las propuestas, y seguramente, la mayor diferencia es la libertad para poder proponer cambios sin tener hipotecas, mochilas ni condicionantes de cualquier tipo". 

Son continuas las peticiones para que su partido se defina ideológicamente, pero Rivera lo tiene claro: "Yo creo en las ideologías, pero no en las etiquetas. Creo que hay que tener ideología, que es lo que te permite desarrollar un programa electoral". Y no duda en reafirmar sus principios: "Creemos en la igualdad de oportunidades y en las libertades individuales. Conjugamos esos dos valores, lo que en Europa se llama 'tercera vía', pero que nunca ha existido en España".

Ante las insistencias de los periodistas, el líder de Ciutadans afirmo: "Nosotros somos progresistas". Sin embargo, matiza: "En España hemos conseguido una cosa que nos parece fundamental: que la Constitución incorpore los derechos sociales y el Estado del Bienestar, y a la vez reconozca la economía de mercado y la libertad de empresa. Esto no puede ser incompatible si queremos crear riqueza y redistribuirla".

Creo firmemente que es un líder emergente que merece la pena seguir siendo escuchado.