viernes, 8 de marzo de 2013

Dia de la mujer trabajadora




DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER TRABAJADORA




MI RECONOCIMIENTO Y GRATITUD A TODAS LAS MUJERES
Un 8 de marzo de 1857, un grupo de obreras textiles tomó la decisión de salir a las calles de Nueva York a protestar por las míseras condiciones en las que trabajaban.


Distintos movimientos se sucedieron a partir de esa fecha. El 5 de marzo de 1908, Nueva York fue escenario de nuevo de una huelga polémica para aquellos tiempos. Un grupo de mujeres reclamaba la igualdad salarial, la disminución de la jornada laboral a 10 horas y un tiempo para poder dar de mamar a sus hijos. Durante esa huelga, perecieron más de un centenar de mujeres quemadas en una fábrica de Sirtwoot Cotton, en un incendio que se atribuyó al dueño de la fábrica como respuesta a la huelga.



8 de marzo de 1910, en  Copenhague, Dinamarca y en el marco de la Segunda Reunión Mundial de Mujeres Socialista, Clara Seltkin propone la institucionalización del Día Internacional de la Mujer. Las mujeres reunidas de forma unánime aprueban la propuesta y escogen el 8 de marzo para la celebración en reconocimiento a las trabajadoras que murieron en el movimiento obrero de la fábrica “Textilera Cotton”, ocurrida 53 años antes.
Un hecho extraordinario en la organización internacional de las mujeres tuvo lugar en Pekín, China, durante septiembre de 1995. Representantes de 189 gobiernos y más de 2.100 organizaciones no gubernamentales (ONG) se reunieron para plantear un nuevo programa para la igualdad y el empoderamiento de las mujeres. La conferencia oficial y el foro paralelo de las ONG fueron los más grandes en la historia de la ONU, y atrajeron a más de 50.000 participantes y observadores.


Construida sobre el trabajo de las convenciones previas de 1975, 1980 y 1985, durante la Década de las Naciones Unidas para la Mujer, la cuarta conferencia mundial sobre las mujeres de la ONU produjo la Plataforma de Acción de Pekín, que aún sigue siendo el compromiso por los derechos de las mujeres de más alcance internacional. Patricia Licuanan, miembro del Consejo Global de IMOW, actuó como presidenta del comité En 1990, la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW, por sus siglas en inglés) revisó los documentos y el progreso desde la conferencia mundial de Nairobi de 1985. Se concluyó que la igualdad en la ley se había logrado ampliamente, pero no la igualdad en los hechos.
Eso le dio a la comisión el ímpetu para hacer algo drástico, y se decidió planificar una cuarta conferencia mundial sobre las mujeres, una que se centrara en áreas de prioridad con acciones y objetivos estratégicos. La planificación empezó en 1990. Yo era la representante filipina, la vicepresidenta de entonces y, con el tiempo, la presidenta de la CSW y la comisión de planificación de la conferencia.


Seleccionar un título para la conferencia fue muy revelador. Al principio, el favorito era "La mitad del mundo, la mitad del poder", probablemente recomendado por las europeas. Inicialmente, obtuvo mucho apoyo, pero entonces prevalecieron mentes más sobrias, particularmente del mundo en desarrollo. Pensaban que era amenazador y podría ahuyentar a los hombres. Entonces, la segunda sugerencia fue "Unión por la igualdad, el desarrollo y la paz". Pero descubrimos que no hay ningún carácter chino para la unión entre hombres y mujeres fuera del matrimonio. Así que finalmente quedó con "Acción por la igualdad, el desarrollo y la paz".

 


DECLARACIÓN DE PEKIN 1995
1. Nosotros, los Gobiernos que participamos en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer.
2. Reunidos en Beijing en septiembre de 1995, año del cincuentenario de la fundación de las Naciones Unidas.
3. Decididos a promover los objetivos de igualdad, desarrollo y paz para todas las mujeres del mundo, en interés de toda la humanidad.
4. Reconociendo las aspiraciones de las mujeres del mundo entero y tomando
nota de la diversidad de las mujeres y de sus funciones y circunstancias, haciendo honor a las mujeres que han allanado el camino, e inspirados por la esperanza que reside en la juventud del mundo.
Reconocemos que la situación de la mujer ha avanzado en algunos aspectos importantes en el último decenio, aunque los progresos no han sido homogéneos, persisten las desigualdades entre mujeres y hombres y sigue habiendo obstáculos importantes, que entrañan graves consecuencias para el bienestar de todos los pueblos.
6. Reconocemos asimismo que esta situación se ha visto agravada por una pobreza cada vez mayor, que afecta a la vida de la mayor parte de la población del mundo y tiene sus orígenes en el ámbito nacional y en el ámbito internacional.
7. Nos comprometemos sin reservas a combatir estas limitaciones y obstáculos y a promover así el adelanto y la potenciación del papel de la mujer en todo el mundo, y convenimos en que esta tarea exige una acción urgente, con espíritu decidido, esperanza, cooperación y solidaridad, ahora y en los albores del nuevo siglo.

3 comentarios:

  1. Agradecidas Jesús, por lo que es, vale y representa que todos los 8 de marzos te acuerdes de nosotras. La crisis también está afectando a nuestro proyecto de igualdad. Pero como bien conoces la posición real del empoderamiento de la mujer es imparable aunque queda todavía mucho trabajo por recorrer. Un abrazo

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    1. Nos unimos a un homenaje a vosotras y al mismo tiempo pedimos un 8 de marzo legal. Una reflexión sobre las leyes que os discriminan aun hoy día en casi todos los lugares del mundo. Recordamos el derecho a vivir, vivir, ni siquiera ya dignamente, a ser mujer sin mutilaciones, a la participación en organizaciones del mundo de la fe, a un salario digno e igual, a una percepción como persona y no como objeto.

      En el sector legal tenemos a muchas activistas, algunas anónimas, otras muy conocidas, pero todas ellas con la firme convicción de valer por ser persona y por ser profesional. Felicitamos a todas

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  2. Pedro Rodriguez Galán8 de marzo de 2013, 17:43

    Sin embargo, aún a día de hoy, se ve empañado por datos sobrecogedores que evidencian que, además del camino abierto hasta ahora, queda todavía mucho por andar. Hasta el 50 % de las agresiones sexuales se cometen contra niñas menores de 16 años. 603 millones de mujeres viven en países donde la violencia doméstica no se considera un delito. Hasta el 70 % de las mujeres aseguran haber sufrido una experiencia física o sexual violenta en algún momento de su vida. Más de 60 millones de niñas son novias y se casan antes de los 18 años. Por realidades como estas y bajo el lema «Una promesa es una promesa: Es hora de actuar para acabar con la violencia contra la mujer», el Día Internacional de la Mujer se vuelca este viernes en la lucha contra el sufrimiento del género femenino. Así lo ha establecido la ONU en su afán por reforzar el compromiso de la comunidad internacional hacia situaciones que, lamentablemente, se repiten en el año 2013 en todos los rincones del mundo y que afectan a siete de cada diez mujeres. «No hay lugar en el siglo XXI para la discriminación y la violencia contra mujeres y niñas». Así lo ha asegurado la Directora Ejecutiva de ONU Mujeres Michelle Bachelet en su discurso en ocasión del Día Internacional de la Mujer que este 8 de marzo se celebra en todo el mundo.

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