lunes, 12 de mayo de 2014

Una ley que pueda CAMBIAR el sentido de el voto



MIENTRAS NO SE CAMBIE LA LEY ELECTORAL….. ESTE PAÍS NO CAMBIARÁ.
El CIS es el instituto del estado que hace encuestas y por tanto siempre da como ganador al partido que gobierna. Es una manipulación porque después de estar viendo como los que provocan las crisis no solo no son castigados sino son "rescatados". Y es que la ley electoral de la transición provoca la alternancia en bipolaridad en el congreso y en el gobierno entre los dos partidos políticos más votados, que en realidad visto los hechos son el mismo y lo demás es paripé, porque mucho hablar y al final firma los unos lo que les pongan delante los otros.
Esta ley quita literalmente votos al tercer partido para dárselos al primero...no respeta " una persona un voto " y verídicamente borra y roba la voluntad política de las personas.
Es delirante que exista  por otro...no tiene sentido democrático en absoluto. Está claro que BENEFICIA A LOS QUE HAN HECHO LA LEY...luego lo de la transición es una mentira. Mientras no se cambie esta ley la vida de este país no cambiará y habrán niños que pasen hambre sin casa incluso, habrá crisis cada quince años, la educación-cultura y la justicia serán un lujo, la corrupción, el abuso de poder, el ninguneo y la picaresca lo normal, ganarán los de siempre, perderán los mismos, los ricos serán más ricos y los pobres más pobres, la desgracia y la locura nuestro verdadero pan.
Esta forma de hacer política desde el poder no tiene ética ni por tanto ideología, solo intereses. . Esta es la política de la maldad: en vez de ver los hechos y evidencias, reconocerlo y demás, se es malo hasta ver quien es más cabezón y gana.
Lo de verdad preocupante, es la pasividad de los buenos y/o acomodados no la perversidad demente d los codiciosos. En dos años esto y lo otro, esperar dos años, dos años y ya, solo dos años más...etc., lo de los "dos años"...malo malo.
La culpa de la crisis del PSOE: posiblemente, aunque hizo lo de Aznar (no I+D+i y basar la economía en el ladrillo), pero a favor que desarrollo las energías alternativas (el PP las ha eliminado cuando éramos potencia mundial en esta tecnología) y nos sacó de la guerra que tantos millones cuesta. Además que son el mismo partido porque mucha "oposición" pero es paripé porque al final en lo que quiere el PP firman a favor...Así que haciendo lo del PP y mejor porque hizo lo de las energías alternativas, la crisis la produjeron los bancos con su burbuja inmobiliaria y porque la crisis está calculada a nivel bursátil con desinversiones de sus aliados y a base de no crear empleo.

viernes, 9 de mayo de 2014

El empleo de @




COMBATIR EL MACHISMO CON EL LENGUAJE
No a la duplicidad machacona del masculino y el femenino a la que tanto amor aparente demuestran los propagandistas de la corrección política… O el empleo de @
Los anuncios sexistas que siguen apareciendo entre series y programas, lejos de fomentar hábitos igualitarios, siguen dejando a las mujeres como "responsables" de la casa y el cuidado de los hijos o, simplemente, como meros objetos sexuales. Estos spots no sólo contradicen lo establecido en la Ley de Igualdad, sino también la Ley General de Publicidad, que considera fuera de la legalidad todo anuncio que "atente contra la dignidad de la persona o vulnere los valores y derechos reconocidos en la Constitución". El machismo de todos nosotros. El lenguaje tampoco puede reparar los estragos del machismo y, si se le encomienda políticamente esa función con carácter coactivo, el machismo seguirá vivo, pero el lenguaje se degradará.
El informe suscrito por todos los académicos de la Lengua asistentes a la sesión del 1 de marzo de 2012. Ha desmontado muchos tópicos de corrección político-lingüística, reorienta implícitamente el núcleo de la lucha contra el machismo al ámbito extralingüístico y demuestra los límites del lenguaje como instrumento de lucha contra el machismo.Combatir el machismo con el lenguaje tiene mejores caminos que la duplicación machacona del masculino y el femenino a la que tanto amor aparente demuestran los propagandistas de la corrección política. Imaginaros que el genio del idioma decidiera darles la razón a los prescriptores del lenguaje o/a y, por arte de magia, todos los libros de sus bibliotecas personales se metamorfosearan y quedaran reescritos en o/a. ¿No se lo pensarían dos veces antes de releer sus libros más queridos? Acabaríamos con los bosques y con los bytes, y, además, yo creo que no lo superaría. O, bajando a tierra, ¿se imaginan estar media hora viendo su serie favorita en televisión o siguiendo el debate en lenguaje o/a? Me rindo de antemano. Llámenme machista, que ya es llamar, pero, por favor, no me obliguen a pasar por ese trance.
Si queremos analizar el tema del machismo de forma más eficaz debemos apuntar a otro lado: las conductas machistas no percibidas como tales. Y a ello voy, al machismo de todos nosotros, a ese que comparte con las bacterias y los anuncios navideños de perfumes al menos dos características: la ubicuidad y la aparente imposibilidad de ser erradicado. De hecho, milenios de historia destilan la desalentadora duda metafísica sobre su extirpación, habida cuenta de nuestra diferenciación sexual. Ahora bien, pasar de la dificultad de su eliminación a la imposibilidad de una sustancial reducción es un salto demasiado obsceno que solo se atreven a dar quienes sacan.
El machismo adopta un catálogo de conductas determinadas, una ideología social, una concepción supremacista del mundo, una desviación patológica de la personalidad, una forma arrogante y despreciativa de hablar, una vulgar excusa para conseguir determinados fines egoístas e incluso una lamentable expresión del miedo al diferente, a un diferente cuyos códigos no dominamos porque no nos hemos molestado en captarlos y analizarlos.Seguramente el machismo se puede describir de unas cuantas maneras, pero una en la que deberíamos coincidir es la negación de la igualdad de derechos y obligaciones, y consecuentemente, del derecho a la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.Aparte de los asesinos y maltratadores, me preocupan los machistas evolucionados. Y también las mujeres instaladas en unas desiguales relaciones machistas que, por algún motivo, no tienen mayor interés en redefinir. Estas últimas podrían ser motivo de otra reflexión, porque creo que sería confuso mezclar estas dos categorías y, habida cuenta de que hacen mucho más daño los verdugos enmascarados que las víctimas conformistas.

 
 
 





jueves, 8 de mayo de 2014

Las buenas intenciones del Ejecutivo socialista han quedado en papel mojado




LA PUBLICIDAD ACTUAL PUEDE RESULTARNOS SEXISTA,
Y lo es, hace medio siglo alcanzó sus máximas cotas de vejación para con la mujer.
Paradójicamente, coincidió con las primeras oleadas de la llamada “liberación de la mujer”, el proto feminismo que empezaba a darse en los países occidentales que se subían al tren del “progreso”, con España varios vagones por detrás. Todos los medios de comunicación respetarán la igualdad entre mujeres y hombres, evitando cualquier forma de discriminación. Así solicita el artículo 39 de la Ley para la igualdad efectiva de mujeres y hombres aprobada por el anterior Gobierno socialista. Sin embargo, las buenas intenciones del Ejecutivo han quedado en papel mojado porque los medios, a los que se les dejó autorregularse, no siempre cumplen esta normativa. Los anuncios sexistas que siguen apareciendo entre series y programas que, lejos de fomentar hábitos igualitarios, siguen dejando a las mujeres como "responsables" de la casa y el cuidado de los hijos o, simplemente, como meros objetos sexuales. Estos spots no sólo contradicen lo establecido en la Ley de Igualdad, sino también la Ley General de Publicidad de 1988, que considera fuera de la legalidad todo anuncio que "atente contra la dignidad de la persona o vulnere los valores y derechos reconocidos en la Constitución".
Uno de los orígenes del problema es haber dejado esta responsabilidad en manos de los propios medios, que buscan beneficio económico y en los que son mayoritariamente hombres los que tienen poder de decisión. La ley es exigente y funciona, pero se siguen colando anuncios en los que se deja entrever que las mujeres son como personajes secundarios que emanan del hombre. Nuestra sociedad es sexista y hay hábitos comunes que se reproducen en la publicidad, sobre todo en la de juguetes y alimentación. Según el artículo 3 de la Ley General de Publicidad, también son ilegales aquellos anuncios que "presenten a las mujeres de forma vejatoria, bien por servirse de su cuerpo "como un objeto, bien por vincular su imagen a comportamientos estereotipados. Sin embargo no hay mayoría a la hora de establecer lo que es un contenido vejatorio o discriminatorio para las mujeres y los límites son difusos.
Una barrita con vida que late en el bolsillo
Aquí, algunos ejemplos de ello:
Uno de los últimos productos en irrumpir en las pantallas (y estantes de bollería) españolas ha sido el Qé!Crack!. Una barrita con vida que late en el bolsillo de un muchacho, justo al lado de su pene. Cuando una mujer le pregunta "¿Y eso?", él responde: "Bueno... por si te apetece comer algo". 
Coherentemente con este rol pasivo y complaciente, la mujer del anuncio suele ser víctima una notable incapacidad para manejarse en la vida, entender los nuevos aparatos o incluso desenvolverse en la cocina, su territorio soberano. Tarde o temprano tu mujer te llevará a casa, reza el eslogan de un Volkswagen Escarabajo de los años 70. “¿Esto es un ordenador?”, se pregunta la secretaria (rubia) sentada junto a un mamotreto con aspecto de máquina de escribir con atisbos de inteligencia (la máquina).


  U n socialista, no debería estar de acuerdo con el pacto entre socialistas en Cataluña. Cada persona mira a través de un cristal de di...