La voluntad de cambio
Pero,… ¿realmente quién manda en España? Estamos abocados a que nuevamente nuestro Parlamento sea una representación teatral, con diputados creyendo que son los comediantes del pueblo. Con ciudadanos convencidos de que su voto sirvió para algo. Seguro que sigue habiendo más de un parlamentario, que nos representa, que roba y encima de robar, no paga impuestos escaqueando el dinero fuera del alcance de la fiscalidad, que no contribuye al crecimiento del país y encima pretende que los trabajadores tengan menos derechos, menos dinero en sus bolsillos. Que se empeña en deudas con la banca y obedece los dictados de quienes, después de ir a misa con traje y corbata, se llevan sus sacas engordadas a paraísos fiscales. Que salen por los medios diciendo que son los representantes de los derechos, de la libertad y la justicia, del respeto a la Constitución. Estos garantes del crecimiento y de la estabilidad conceden obras a cambio de comisiones, aprueban presupuestos favoreciendo a l