miércoles, 22 de octubre de 2014

Hemos picado de nuevo




SI YO FUERA  P. IGLESIAS NO SÉ QUÉ HARÍA
Tenía una mosca detrás de la oreja y no ha sido capaz de matarla, pero sabe que está ahí. También tiene un miedo atroz a los infiltrados, a los desestabilizadores y a los topos. No podrá deshacerse de ellos porque pululan a millones. 
España es así, un país de pillos, de piratas y de oportunistas. Allá donde ven asomar a algo parecido a jauja o maná, allí se van raudos a codazo limpio entre ellos, a zancadillas para ver si llega uno antes que otro. Allá donde ven asomar oportunidad, allá donde ven que parece cortoplacismo, el inmediato, el ya, allí están los españolitos de a pie cabalgando encima de la montura del oportunismo. Aprovechando cualquier atisbo de poder, cualquier asomo de ganar para acercarse sin cautela alguna, al galope y  empujones.

Se le iban a colar infiltrados, topos, zorros y comadrejas. Los oportunistas aspirantes a sillón de concejalías, de alcaldías o de diputados o senadores. Se les iban a colar los aspirantes a diputaciones y a puestos de Dirección General de algo. Y ahí están. No acaban de arrancar y ya salen las cabezas de entre el fango intentando colocarse en posición, queriendo sobresalir por encima del otro. Yo primero, la técnica más usada en este país cuando de acaparar poder se trata o cuando el asunto va de alimentar egos, de asumir protagonismos y de destacar por encima del presunto oponente.

Si yo fuera Pablo Iglesias no sé qué haría, pero dada la jauría que ahora mismo es el proyecto de algunos relacionados con Podemos, dan ganas de abandonar y dejar que se estrellen con todo el equipo de ambiciones desmesuradas, de egoísmos desproporcionados y afán de protagonismos exacerbados. A destiempo y fuera de lugar del proyecto Podemos.

Hay una buena parte de los que forman los círculos de Podemos que supieron colocarse ahí quizá por su facilidad de palabra, por su facilidad para atraer la atención de los demás, quizá por mala elección de quienes tenían esa responsabilidad. Ahora están aprovechando esa posición ventajosa y ventajista para intentar llevar las ideas y los proyectos a su ascua. Esos por un lado. Por el otro están los que ya entraron con el propósito de desestabilizar y de crear rencillas y enfrentamientos, de sembrar cizaña. Los presuntos jueces y fiscales, lo que todo lo entienden y todo lo critican porque sí. Los que ahora a Podemos le exigen lo indecible y sin embargo se pasaron por alto todas las mamarrachadas que estos que ahora gobiernan, más los que gobernaron y los que aspiran a seguir mangoneando todo lo que se les antoje, ha hecho y deshecho en este país.

Ahora mismo, lo que en un principio se creó contra el PP y sus maquiavélicas e inhumanas decisiones, está siendo utilizado por los interesados para enfrentarse desde dentro y destrozar la idea de Pablo y cia. Se veía venir, el Poder no se podía quedar quieto ante la amenaza de ver peligrar sus privilegios.

La gente aún no se dio cuenta de quienes son esa morralla y de lo que son capaces de hacer. Es por esto que conviene hacer un frente común, dejarse de tonterías de liderazgos o protagonismos y elaborar un proyecto que sea capaz de derrotar a estas alimañas que nos gobiernan. Si no sabemos hacer eso, no solo nos engullirán, sino que nos engulliremos entre nosotros mismos, para regocijo de los que intentan crear ese clima que tanto les favorece y para alimento de los egos que intentan ahora, ante la oportunidad de erigirse en protagonistas de unos y líderes de todos.

Y hemos picado de nuevo. Y volveremos a caer en las redes. Este país no tiene remedio. ¿Cuándo aprenderemos y cuánto? ¿Cuándo cambiaremos y cuánto?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

  U n socialista, no debería estar de acuerdo con el pacto entre socialistas en Cataluña. Cada persona mira a través de un cristal de di...