Libertad de expresión
NOS INFORMAMOS A
TRAVÉS DE LA TELEVISIÓN
El líder de
Podemos convierte la presentación del libro 'Conversaciones con Pablo Iglesias en una discusión con los
periodistas sobre el papel de los medios de comunicación en la democracia. El
acto terminó por convertirse en un debate entre el líder de Podemos y los
periodistas. "Los ciudadanos están hartos de la
manipulación informativa", ha denunciado el líder de
Podemos, que achaca dicha adulteración a "la concentración de la propiedad
de los medios de comunicación", que "amenaza
la libertad de expresión".
La realidad es más de las tres cuartas
partes de los de los españoles nos informamos exclusivamente a través de la
televisión, y las televisiones están en manos de multimillonarios, con la excepción
de RTVE, en el que actualmente el Gobierno hace lo que le viene en gana, y así
fue también en la larga época de Felipe González y en la de Aznar. Solo Zapatero
estableció que el Director General fuese elegido por consenso y dando lugar a
los informativos más objetivos de la historia del RTVE. Pero este acuerdo lo
anuló el gobierno del PP nada más llegar al poder y sin que se inmute ante la
pérdida de neutralidad, calidad y audiencia. De la misma forma las cadenas autonómicas,
casi todas en práctica en bancarrota, también se encuentran controladas por sus
gobiernos respectivos y nos ofrecen sus mensajes subliminares.
Efectivamente, las cadenas privadas son
propiedad de multimillonarios: Telecinco y Cuatro De Berlusconi, y A3 y La
Sexta del también propietario de Onda Cero, La Razón y el grupo Planeta. Con estas
premisas, ¿cómo puede haber libertad,
neutralidad y sobre todo honestidad en la información? Sin embargo un ligero
oasis informativo lo encontramos en la Sexta, en donde el librero Lara mantiene
a Wyoming, Jordi Évole, Ana Pastor, La Sexta noche de los sábados, a la que
acude Pablo Iglesias, y Al rojo vivo, porque ya estaban cuando compró la cadena
y marchan bien de audiencia, aunque veremos cuánto duran y si ellos mismo no se
regulan. Las televisiones con medios audio visuales son los más efectivos a la
hora de conseguir transmitir un mensaje de intentar inculcar alguna recomendación.
La televisión tiene muchas probabilidades de modificar conductas o hábitos de
consumo, si además añadimos que a todo esto la censura gubernamental y la
desinformación programada por quienes le interesa Entonces llegamos a la
conclusión de apagar definitivamente la televisión o centrar la atención en
reportajes, así como en programas de bricolaje o de recetas de cocina. Eso sí,
mientras duren los reportajes, porque de publicidad también andan bastante
sobrados.
La televisión es el medio de
contaminación más recurrido por los intereses empresariales, políticos,
económicos y demás colectivos interesados en hacer llegar el mensaje que les
interesa. Y si la recomendación que les interesa fuera de utilidad para las
personas, bienvenida sea, pero cuando se usa para manipular o con la mentira, entonces
acabamos por concluir que la mejor solución es apagar y ponerse a leer un libro,
o pasarse directamente a los sudokus o crucigramas, o hablar con la gente.
Pero las radios también tienen su
técnica y la utilizan para llegar con su mensaje de igual manera pero con
diferentes métodos. Y no digamos los periódicos que se ceban en los grandes
titulares tendenciosos y conductores. Todo está manipulado, no existe la
imparcialidad, la objetividad informativa y la profesionalidad. Estudiar
durante años una profesión, jurar un código hipocrático para juego venderse al
mejor postor, ¿quién escapa al sistema? ¿Quién es capaz de evadirse del aparato
del Gran Hermano que todo lo controla? ¿Quién?
Con la prensa ocurre lo mismo, con la
agravante de la caída de El País, uno de los más hermosos soportes de la
libertad democrática, en las garras de los bancos y de un fondo de inversión. Aparte de que están todos en la ruina. Además, todos los medios
están presos de la libertad y de los anunciantes. ¿Cómo denunciar a Telefónica,
si cometiere una irregularidad cuando hay un anuncio de esa compañía al lado de
tu escrito?
Ahora mismo, existen medios privados de derechas, de izquierdas, de nada... Cada cual, en libertad, elige cómo quiere informarse. Yo no leo La Razón ni ABC, por razones obvias. Pero me parece fantástico que la gente conservadora pueda informarse a través de ellos. Tampoco me gusta en exceso Público, porque, al igual que los otros dos diarios, sesga su información (solo tenemos que ver los titulares y editoriales de hoy: "Como se prepara la izquierda para ganar Madrid", con alabanzas a IU, Podemos o Equo, y utilizando lenguaje como "casta" y "biaprtidismo"; "Más cerca de ganar Madrid"; "La "irrupción" de Podemos cumple sus primeros cuarenta días"; etc. Y podemos ver noticias y opiniones similares en infolibre, o en eldiario.es. ¿Acaso estos medios no son privados? ¿Acaso Pablo Iglesias no se pasea por Cuatro y La Sexta como si estuviera en su casa?
ResponderEliminarSeñores: afortunadamente, en este país existe libertad de prensa, y como cada ciudadano es mayor de edad (como dice Pablo Iglesias), que decida qué es verdad o mentira para él o ella. Pero que no me venga el gobierno de turno a decirme que solo existe una verdad, la suya, y que se permita la osadía de controlar la libertad de cada medio de comunicación para opinar lo que le venga en gana. ¿O acaso alguien os obliga a informaros con La Razón o con las noticias de Antena 3? Libertad, compañeros. Basta ya de querer controlar lo que la gente debe o no leer. Si Pablo quiere recuperar el Ministerio de Información franquista, que lo experimente en otros lares. Pero no con mis impuestos.