NOS SIGUEN AHOGANDO

ANTE EL PROXIMO RECIBO DEL IBI

Si no se frenan los gastos municipales, los Impuestos de Bienes Inmuebles pueden llegar a ser inabordables. La mayoría de los propietarios ven como, el valor de la vivienda decrece, sus impuestos crecen  y su sueldo cada vez es menor. Mientras los políticos municipales, son demasiados y  cada vez cobran  más y más. 

La deuda pública en España ha crecido en el tercer trimestre de 2013 en 11.448 millones de euros y se sitúa en 954.863 millones. Esta cifra alcanzó el 93,40% del PIB en España, mientras que en el trimestre anterior, segundo trimestre de 2013, fue del 92,20%. Este monumental endeudamiento ha ido provocando una serie de ajustes en la función pública que hemos ido y seguiremos pagando entre todos. 

Desde este y otros medios llevo denunciando que el Ayuntamiento de Valdemorillo ha incrementado de los valores catastrales sin  corresponder con el Valor del Mercado Inmobiliario.

Desde 2008, hemos visto como crecía su recibo del IBI, con subidas que en muchos casos alcanzan llegan a superar el 100%. La actualización de los valores catastrales, la subida de los tipos impositivos, el aumento de recargos y la eliminación de bonificaciones, unida al incremento extraordinario aplicado por el Gobierno en 2012 y 2013 están detrás de esta subida.

INCREMENTOS DEL IBI PARA LOS PROXIMOS AÑOS EN VALDEMORILLO

España necesita una regeneración de la clase política, no puede salir adelante mientras exista tanta gente que viva de "la sopa boba" o alrededor de ella, como: Alcaldesas y montones de concejales, asesores de esto y de aquello que solapan en sus competencias. ¿Son necesarios tantos cargos? Otra Auditoria y... ¡a adelgazar la Administración! Y no solos por afilar el gasto, también por eficacia, pues unos pocos, los mejores, gestionarían mejor, aunque tuvieran que trabajar más tiempo y con mayor eficacia. Mientras la clase trabajadora en su conjunta cobra un sueldo mucho menor y ha sido sometida a un fuerte incremento de su contribución publica para mitigar la deuda que hemos llegado a contraer.

Los Ayuntamientos han generado un agujero financiero impagable que ha arrastrado al músculo financiero de las Comunidades Autónomas y Ayuntamientos que no eran otras que las antiguas Cajas de Ahorros a la quiebra en cadena, gobernadas por políticos en sus Consejos de Administración que han financiado cuanto las administraciones que representaban obligaban para seguir la fiesta. A día de hoy no han sabido hacer frente a la especulación política y económica que ha culminado en el caos actual.

Al parecer los políticos en el gobierno municipal de Valdemorillo han decidido de manera unilateral no solidarizarse con la realidad económica de la función pública y quieren cobrar más que y mantenerse al margen de la realidad social. Ellos son perfectos conocedores de la especulación de sus sueldos, en la mayoría de los casos no injustificables. A pesar de conocer que una buena parte de la ciudadanía está atravesando por una crisis económica antes desconocida.

Todo va bien

EL OTRO ESTADO DE LA NACIÓN

Siguiendo el guion pergeñado por el equipo habitual de Jordi Évole, Rajoy hizo doblete como presidente del gobierno y como oposición al gobierno anterior (“el mejor papel para el que está preparándose desde los albores de la Santa Transición”). Rubalcaba, por su parte, se mostró más crítico que de costumbre, no en vano hay elecciones a la vista. “El mejor momento de todo el documental, en mi opinión, el que retrata la catadura (con ‘t’) moral de los representantes del pueblo, es el de la estampida de sus señorías cuando salen de la tribuna los principales actores del documental. “Realismo en estado puro” y una demostración al respetable de su talante democrático.

Preguntado por la “Razón” para no hacer arrodillarse a sus señorías y pedir perdón al pueblo, ésta fue su respuesta: “Hombre, se trataba de que pareciera verdad sin serlo.

Ya en la calle, por la insobornable vocación de servicio, pregunto al público qué le ha parecido este docu-ficción. He aquí algunas de las repuestas:

R. “A mí me han gustado mucho los chistes de Rajoy”, dice un parado de larga duración. “Es como Eugenio pero sin taburete”, dice su acompañante, un joven que ha perdido todas las becas para estudiar.

R. “Al principio me dio el pego, me lo creí del todo hasta que Rajoy dijo la palabra ‘aborto’, aunque fuera medio de tapadillo. Ahí me di cuenta del engaño”, expone una usuaria de la sanidad pública arrinconada en un pasillo hospitalario. “Es que mi suegra está esperando que la examinen desde hace diez horas y aproveché el tiempo para ver el programa en la tele que se había traído un paciente aquí al lado, el de la camilla que hace doce de este pasillo de urgencias. El hombre se trajo la tele junto al pijama, el agua, los dodotis y el pie del goteo… con esto de los recortes ya se sabe”.

R. “A mí me pareció magistral, y lástima que no fuera verdad al final. Vibré con la descripción de los ríos de leche y miel que brotan por doquier”, explica un bróker juvenil con aspiraciones a jefecillo de Mercado (libre, por supuesto).

R. “Yo me di cuenta al instante de la falsedad del documental”, asegura firme un exvotante del PePé. “Es imposible que alguien pueda mentir tanto, durante tanto tiempo y engañar a tanta gente. Fíjese en mí”.

A estas alturas de la legislatura, con el horizonte cargado de elecciones, sin duda le esperan días de gloria al gran periodista que es Jordi Évole.

Nuevamente la corrupción

“TODOS” CONTRIBUIMOS EN MENOR O MAYOR MEDIDA

Al mal de la corrupción “todos” contribuimos en menor o mayor medida. Unos  por acción y otros por omisión. Somos responsables porque al ser un mal social atañe a toda la sociedad en su conjunto.

La viñeta del Roto, sintetiza este tema

El último barómetro del CIS confirma el desprecio que sienten los ciudadanos hacia la corrupción, los corruptores, corruptos y todos aquellos que siguen haciendo el “caldo gordo” a los irresponsables que nos están robando el pan y la sal. La población en su conjunto permanece estupefacta comprobando la impunidad de estos malhechores que amparan sus fechorías bajo el paraguas del estado de derecho, escapándose a través de orificios legales, con ayuda de cómplices políticos que ostentan el poder que les hemos entregado nosotros. También, en el mismo saco, incluimos a todas las togas y compañeros de tropelías partidistas que lo toleran, lo protegen y lo defienden. Son ellos mismos, los representantes del pueblo soberano, los primeros que deberían estar interesados en destapar el frasco de la inmundicia y vaciarlo en la cloaca, para no quedar ellos atrapados en el vertedero pestilente de la permisibilidad cómplice.

Los ciudadanos, comprobamos que además de desahogarnos en escritos como este, poco o casi nada más podemos hacer, para ver encerrados en prisión a los tramposos, rateros y ventajistas que han mentido y estafado con la vulgaridad de los becerros y la grosería de un rebuzno en el templo.

Las frías estadísticas muestran desde las portadas de los periódicos que España ocupa el ignominioso segundo puesto en el ranking de países donde más crece la corrupción, somos cabeza visible de la escalada estafadora, lo cual no favorece mucho a la cacareada marca España que desprestigian muchos cínicos que la patrocinan incluso fuera de nuestras fronteras.

La corrupción se traduce en trampas, disfraces, escamoteos, mentiras, sobornos y miserias, que consolidan en las instituciones y en el cuerpo social una detestable impunidad derivada de los tribunales de justicia, permitiendo escapar a los indeseables con apelaciones a tribunales o inaceptables indultos gubernamentales.

Campa el fraude y la corrupción libremente por los vertederos institucionales de ministerios y ayuntamientos, proclamando verdades que son mentiras, estafas disfrazadas de errores, regalos a cambio de favores, nepotismo hermanado con servilismo estructurado, nombramientos innombrables, asesorías de la nada, adjudicaciones trocadas en propinas millonarias, sobornos descomunales enladrillados camuflados, votos a cambio de favores, injustas sentencias judiciales acordadas, contaminación politiquera y extraño maridaje de escaños, juzgados, concejalías y reclinatorios. Entonando entre todos, un portentoso “canto del cisne” que se escucha hasta en la Patagonia.

Al fondo, el programa de Jordi Évole del domingo

LA MANIPULACIÓN DE LOS ACONTECIMIENTOS

El Programa-ficción Operación Palace, dirigido por Jordi Évole el domingo, que contó con la complicidad de políticos y periodistas y fue visto por casi seis millones de españoles, generó una gran polémica en las redes sociales.

En Operación Palace, políticos y periodistas, perfectamente sincronizados, aportaron testimonios fabulados de lo que fue el intento de golpe de Estado de 1981 y la violenta irrupción del teniente coronel Antonio Tejero en el hemiciclo del Congreso de los Diputados. Una recreación irreal, una patraña orquestada por La Sexta, que al final desveló su presentador, Jordi Évole, y hacia la que tampoco han faltado críticas al tratar en tono satírico un episodio tan dramático de la reciente historia de España.

¿Puede una mentira explicar una verdad? La nota enviada a los medios de comunicación, previa a la emisión, explicaba que el programa contaba con el testimonio de algunos de los que fueron protagonistas, recuperando el momento histórico que tuvo en vilo a los españoles aquellos días. Éboli, no publico ningún detalle. El experimento mediático se apoyó en falsos documentos desclasificados por la CIA, que supuestamente desvelaban una prodigiosa reunión de los líderes políticos en el Hotel Palace de Madrid, según la cual el Gobierno de Adolfo Suárez planeó un falso golpe de Estado para adelantarse al golpe del 23-F.

Tras esta emisión, Évole pidió disculpas por el engaño y moderó, ya en serio, un interesante debate con Iñaki Gabilondo, que dirigía los servicios informativos de TVE en aquellas fechas; la presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco; y Eduardo Serra, exministro de Defensa.

El periodista nos dio una gran lección sobre LA MANIPULACIÓN y LA MENTIRA. Personalmente, siento discrepar con aquellos que les pareció una tomadura de pelo. Considero fundamental hacer una lectura más allá de  lo que se conoce como la versión oficialista de los hechos, ya que la realidad todavía se nos sigue negando. Tal vez por eso, o solamente por eso, yo me voy a permitir  dar otra versión de la realidad tan novelada como pudiera ser la versión de Jordi Évole pero es otra adaptación que aún nos queda en los mentideros de aquell0s que vivimos esos acontecimientos con el miedo contenido.

Puestos a teatralizar lo acontecido, se me está ocurriendo otra versión de los hechos mucho más valiente y comprometida. La conjetura variable sería: El Rey preparó el golpe con Armada, su consejero de toda la vida acompañado de algunos políticos parlamentarios. El Rey estuvo del lado de los golpistas hasta entrada la madrugada cuando Tejero no se sometió al gobierno de concentración. El Rey al final se apeó de esa aventura para salir como garante constitucional, y salvar la corona con el sacrificio de Armada. No os parece que este hubiera sido un guion más valiente, tratando de acercarnos a una ficción creíble.

El final del programa hubiera sido el mismo: decir que todo es una broma. Pero el debate hubiera sido otro bien diferente.

Hay que ver cómo se puede montar una mentira entre varios participantes y que la mentira sea creíble. El programa que vimos fue, una autentica patraña con momentos interesantes, bien tratados y magistralmente presentados para plantear un debate intergeneracional.

4.- desde mi retiro