A las mujeres maltratadas
LA VIOLENCIA PSICOLÓGICA Y
SEXUAL QUE LAS MUJERES SOPORTAN EN SU VIDA COTIDIANA.
La violencia contra la mujer tiene hondas raíces sociales y
culturales, un origen plural y se ha utilizado como un instrumento para
mantener la discriminación, la desigualdad y las relaciones jerárquicas de
poder de los hombres sobre las mujeres.
En todos los
procesos de violencia hacia las mujeres subyace un elemento transversal que es
la socialización de género. Por un lado, la posición de poder en que los
hombres son educados y el modelo de relación de control-dominio que aprenden a
establecer con las mujeres, y por otro, la posición de sumisión, dependencia e
inseguridad en la que son educadas las mujeres. La interacción entre ambos
fenómenos de origen social y cultural, la forma en que se construyen las identidades,
el modelo familiar y otros factores de origen estructural, facilitan la
aparición y el mantenimiento de la violencia de los hombres hacia las mujeres. Además,
la desvalorización social de lo femenino, la falta de poder y de reconocimiento
de su autoridad, son factores que han contribuido también a que las mujeres se
conviertan en víctimas de violencia.

El avance
social, protagonizado especialmente por las mujeres, en la lucha contra la
violencia de género ha tenido como uno de sus resultados un marco normativo que
define claramente qué es violencia de género y cuáles son sus causas, así como
establece mecanismos para erradicar esta lacra social.
También limita
la violencia de género a la violencia física, psicológica, incluidas las
agresiones a la libertad sexual, las amenazas, las coacciones y la privación
arbitraria de libertad. Además, amplía la tipología de conductas que
constituyen violencia de género, incluyendo la violencia económica, sexual y
los abusos sexuales.
Comentarios
Publicar un comentario